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Fuente: http://www.abc.es/salud/patologias/20110715/abci-endometriosis-201311281628.html |
Hola mamás, quiero el día de hoy compartir con ustedes un articulo muy interesante acerca de la ENDOMETRIOSIS una enfermedad que causa en muchos casos dificultad para quedar en embarazo, me motivo que el día de hoy mi mejor amiga quien padece esta enfermedad, finalmente confirmo que esta en embarazo y que su gestación va excelente. No saben la alegria que sentimos, ella lleva luchando 8 largos años para alcanzar su sueño de ser mamá y finalmente lo ha logrado.
La endometriosis es una enfermedad de incidencia creciente que afecta a millones de mujeres de todo el mundo. Genera una amplia gama de síntomas, por otra parte fácilmente reconocibles y llega a implicar tanto física como psíquicamente a las pacientes. El éxito de su control está en un pronto diagnóstico, en un correcto manejo médico-quirúrgico y en un abordaje eficaz, pero escasamente agresivo. Las tasas de mejoría y de embarazo son diferentes según centros y son esos datos los que debieran ofrecerse a la mujer. Con el conocimiento preciso de su origen, se espera encontrar tratamientos que actúen sobre su causa y no contra sus consecuencias.
¿Qué es la endometriosis?
La
endometriosis es una enfermedad benigna que afecta a las mujeres durante su
vida reproductiva. Ocurre cuando el endometrio se sitúa fuera
del útero, es decir fuera de su lugar original. Este tejido
incorrectamente desarrollado es capaz de asentarse en cualquier lugar del
abdomen, e incluso en lugares más raros como el ombligo o los pulmones. Las placas que se forman se
llaman implantes cuando son pequeñas, nódulos
cuando son mayores y endometriomas cuando forman
quistes en los ovarios.La endometriosis es un proceso de evolución
imprevisible. Algunas mujeres presentan pequeños implantes que no se modifican
a lo largo de los años, mientras que en otras es posible que se desarrolle
extensamente dentro de la pelvis. Esta enfermedad es inflamatoria lo que a su vez ocasiona adherencias, es decir, puentes de tejido,
responsables de que los órganos se adhieran entre ellos. Los síntomas de la
endometriosis son también muy variables.En algunos casos la mujer no sufre
ninguno y el diagnóstico es casual al operarla por otros motivos. En otros, la
irritación interna del abdomen y las adherencias son las causantes de fuertes
dolores menstruales, dolor con las relaciones sexuales (dispareunia), menstruaciones más abundantes (hipermenorrea), dolor con la defecación (disquecia) o problemas de fertilidad. Su intensidad y
frecuencia dependerá en cada caso, pudiéndose presentar uno o varios.
¿Cuáles son sus causas?
En la actualidad
existen varias teorías del por qué de esta enfermedad. Algunos científicos
creen que una parte de la menstruación discurre por las trompas y cae en el
abdomen en lugar de expulsarse hacia el exterior. Sin embargo, esto ocurre en
muchas mujeres, que, por otra parte, nunca van a desarrollar endometriosis, por
lo que se han buscado más explicaciones. Otra de ellas apunta hacia un posible defecto de la inmunidad responsable de la
limpieza de microbios y de células anormales en el abdomen. No se trata de que
el número de defensas esté disminuido, sino de una menor calidad. Ello
impediría que se reconociesen como extrañas las células endometriales
(normalmente sólo dentro del útero) y les dejarían paso libre para su siembra
en los órganos internos.En algunas familias se encuentran madre y varias
hermanas afectadas de endometriosis, por lo que seguramente también hay factores hereditarios involucrados en la génesis
de la endometriosis; por lo tanto, si una mujer desarrolla endometriosis, sus
hermanas tienen un riesgo superior de padecerla.En resumen, a pesar de décadas
de investigación sobre el tema, todavía no se tiene una explicación
concreta de los motivos por los que unas mujeres sufren
endometriosis y otras no.
¿Qué apariencia tiene la endometriosis?
La endometriosis
es fácilmente reconocible por los médicos cuando se explora el interior del
abdomen. En general, los implantes se disponen en forma de pequeñas baldosas planas y tienen un color marrón oscuro. Cuando se forman los quistes
endometriósicos o endometriomas la sangre que contienen en su interior les
confiere una coloración marrón rojiza oscura, por lo que coloquialmente se les
ha denominado quistes de chocolate. Su tamaño
puede oscilar desde uno o dos cm hasta los diez o quince. Si parte del líquido
que contienen se vierte al abdomen, produce inflamación y como consecuencia,
tejido de defensa o cicatricial. Si estas cicatrices se forman entre dos
órganos aparecen las adherencias y pueden involucrar a útero, ovarios, trompas
e intestino. Si la endometriosis infiltra la pared uterina a modo de raíces se
denomina adenomiosis, lo que hace que el útero aumente de
tamaño, se haga más rojizo y blando y sea más doloroso. Como situaciones más
excepcionales puede incluso afectar a la vejiga de la orina dando molestias con
la micción y pequeñas pérdidas de sangre y al intestino unen el que puede dar
dolores abdominales semejantes a espasmos y diarrea.
¿Qué síntomas
produce?
Dismenorrea o
dolor menstrual: El dolor
menstrual que ocurre durante los primeros años de ciclos menstruales se llama
dismenorrea primaria y habitualmente mejora con la edad y sobre todo, después
de haber tenido hijos. Debe ser motivo de consulta la dismenorrea secundaria,
es decir, aquella que aparece más tarde, que aumenta con los meses y que se
acompaña de algunos de los otros síntomas típicos de la endometriosis.
Generalmente, ese dolor es debido a la formación de unas sustancias desde el
tejido endometriósico llamadas prostaglandinasque
provocan fuertes contracciones uterinas.Hay que tener en cuenta que no todos
los dolores menstruales son debidos a endometriosis, así como no todas las
mujeres con endometriosis presentan dismenorrea tan intensa.
Dispareunia o dolor con las relaciones sexuales: La
penetración vaginal puede presionar alguna de las zonas con afectación por
endometriosis, como son los ovarios (que se sitúan detrás y en la parte más
baja del útero), el techo vaginal y los ligamentos uterosacros (encargados de
mantener el útero en posición correcta y cerca de la parte más baja de la columna
vertebral en el hueso sacro).
Sangrado uterino anómalo: Muchas
de las mujeres con endometriosis no presentan ninguna alteración menstrual, así
como tampoco pérdidas entre reglas. Sin embargo, los cambios que la
endometriosis provoca por la formación de sustancias no habituales en la pelvis
y las modificaciones en el funcionamiento ovárico normal pueden alterar el
ciclo endometrial y generar pequeñas pérdidas extemporáneas.
Problemas reproductivos: En algunas mujeres la
esterilidad (imposibilidad de conseguir un embarazo) o la infertilidad (abortos
de repetición) son el motivo de consulta que permite el diagnóstico de
endometriosis. No hay que olvidar que así como la endometriosis puede ser causa
de conflictos de fertilidad, no todas las parejas con esterilidad o
infertilidad deben ésta exclusivamente a la endometriosis. En toda pareja
estéril, es necesario un estudio completo que incluya en síntesis, comprobación
de la ovulación, analítica hormonal, anatomía del útero, trompas y calidad del
semen. Obviamente pueden sumarse varias causas en la pareja.La endometriosis
puede alterar la fertilidad a través de varios mecanismos: inflamación dentro del abdomen que impida la unión
entre el óvulo y el espermatozoide, adherencias pélvicas
que impidan el movimiento normal de las trompas e incluso las obstruyan,
endometriosis en los ovarios que impida la normal ovulación y fabricación de
las hormonas sexuales y secreción de sustancias dentro
del abdomen que no sean habituales y entorpezcan el proceso normal de
fertilidad.Por otra parte, se desconoce porque una vez conseguido el embarazo,
las mujeres con endometriosis presentan un riesgo mayor de aborto,
riesgo que disminuye cuando se ha corregido la enfermedad. Al parecer estas
sustancias anormales fabricadas por la endometriosis y las alteraciones de las
defensas que generan, pudieran ser las responsables de estas pérdidas
gestacionales de repetición.
¿Cómo se
diagnostica?
El diagnóstico de la endometriosis no puede hacerse sólo basándose en
los síntomas que presente cada paciente. Por lo tanto, deberán realizarse una
serie de exploraciones complementarias para concretar la existencia y la
severidad de cada caso. Recuerde también que el hallazgo puede ser casual en
una visita rutinaria.
Exploración
ginecológica: El ginecólogo
puede encontrar un aumento del tamaño de uno o ambos ovarios, a la vez que
puede apreciar un cierto grado de inmovilidad o fijación de ellos a pared
uterina o al fondo vaginal. Pero son necesarios exámenes adicionales que
confirmen el diagnóstico.
Ecografía: Es la técnica
básica que inicialmente apunta el diagnóstico de endometriosis. La imagen es
relativamente típica, observándose quistes ováricos con un patrón específico. A
más experiencia, más fácil será el diagnóstico. Algunas veces, quistes funcionales,
es decir, esos quistes que desaparecen dejando transcurrir unas semanas, pueden
confundir, por lo que ante una orientación dudosa, será aconsejable repetir la
ecografía pasados pocos meses. Es una prueba preferiblemente llevada a cabo por
vía vaginal siempre que la mujer haya tenido relaciones sexuales.
Análisis
sanguíneos; Estudios
recientes señalan un incremento del llamado marcador CA-125 en sangre en
mujeres que padecen endometriosis. Desgraciadamente este marcador es altamente
inespecífico, por cuanto otras alteraciones en el interior del abdomen en
mujeres premenopáusicas pueden igualmente modificarlo subiendo sus niveles
(apendicitis, miomas uterinos, inflamaciones pélvicas, quistes hemorrágicos
funcionales, cirugía reciente, cáncer, etc) Para complicarlo más, no todas las
mujeres con endometriosis sufren alteraciones en sus niveles de CA-125, sobre
todo en las que es leve. En consecuencia, no es un test que determine
rutinariamente en el protocolo de diagnóstico de la mujer con sospecha de endometriosis.
Laparoscopia: Es una
técnica operatoria que permite observar el interior del abdomen. Se lleva a
cabo bajo anestesia y se realiza en quirófano. A través de pequeñas incisiones
en el ombligo y ambos lados del pubis se introduce la óptica y los instrumentos
de trabajo. La visión de las estructuras ginecológicas ayuda a confirmar la
orientación de endometriosis y tratarla, habitualmente por esta misma vía. En
pacientes jóvenes, máxime cuando el objetivo posterior es alcanzar la
fertilidad, la pretensión es eliminar la enfermedad conservando todo el tejido
sano que sea posible. A la extirpación del o de los quistes endometriósicos se
denomina quistectomía. En pacientes a partir de los 45-50
años la propuesta es la eliminación de ambos ovarios, también llamada ovariectomía con el fin de evitar la degeneración
maligna en el futuro. Del tejido extraído se realiza una biopsiaen el curso de la laparoscopia para asegurar la
benignidad (por otra parte, habitual) de los endometriomas.
Otras técnicas
diagnósticas: En algunas
situaciones, el ginecólogo puede tener que solicitar exploraciones especiales
como TAC (tomografía axial computerizada) o la RNM (resonancia magnética nuclear). Esto ocurre
cuando el diagnóstico de endometriosis por ecografía no es claro o cuando el
marcador CA-125 resulta muy alterado.
¿Cómo se trata?
La
terapéutica de la endometriosis requiere una visión integral de la mujer que ha
de ser aconsejada. Deberán considerarse la edad, los síntomas y el deseo de
fertilidad. En algunos casos, el tratamiento médico sólo, puede ser suficiente,
mientras que otras pacientes se beneficiarán de un tratamiento médico y
quirúrgico combinado.Tratamientos médicos Existen
hoy en día varios tratamientos, con diferentes grados de eficacia.
Antiprostaglandínicos; Se sabe que
existe una mayor producción de prostaglandinas dentro de la pelvis de mujeres
con endometriosis, independientemente del grado de afectación. Se trata de una
sustancia que incrementa la intensidad de la contracción muscular uterina,
propia del dolor menstrual, y la contracción intestinal. Por ello, la tendencia
en estas mujeres es a una mayor pérdida sanguínea menstrual y a mejorar el
ritmo deposicional en los casos de estreñimiento. Son fármacos
antiinflamatorios ya empleados habitualmente en el tratamiento de la
dismenorrea.
Anticonceptivos
orales: Aunque no
está definitivamente probado, parece que el reposo ovárico que produce la
contracepción hormonal disminuiría la posibilidad de progresión y recaídas de
la endometriosis. No es una garantía de curación, pero, si no hay
contraindicaciones, una vez operada la mujer, puede beneficiarse de esta
medicación. En cualquier caso, pueden ayudar a que remita parte de la
sintomatología, el dolor menstrual y reducir las reglas abundantes.
Gestágenos; Fue una de
las primeras medicaciones empleadas con el fin de apoyar la parte del ciclo
hormonal que se creía de peor calidad hace unos años. La tendencia actual es a
su abandono frente a terapias de utilidad más demostrada, aunque evitan
pérdidas, mejoran el volumen de la menstruación y reducen su dolor.
Danazol; Es un
tratamiento que disminuye los niveles de hormonas ováricas actuando en el
origen de su producción a nivel cerebral, con lo que genera una
pseudomenopausia. Tiene ciertos efectos masculinizantes, con mayor o menor
intensidad en función de la paciente y de la dosis y que en algunos casos
obligan a la interrupción de la medicación. Sin embargo, es útil para controlar
la clínica cuando el diagnóstico orientativo es de endometriosis leve (sólo
implantes).
Análogos de la
Gn-RH (gonadotropin-releasing hormone): Es la medicación más nueva y ampliamente
extendida para el control de la endometriosis. Se trata de sustancias que
actúan igualmente a nivel cerebral suprimiendo de modo mucho más intenso la
génesis de hormonas desde el ovario y causando un estado de menopausia
reversible al dejarlas. Sus efectos secundarios son los que se describen
habitualmente en la menopausia fisiológica y de aparición más brusca. Por
ejemplo, sofocaciones, sudoración, dolores articulares, sequedad vaginal,
retención de líquidos, etc... pero que pueden suavizarse con otros fármacos que
se den simultáneamente. Su función principal es la cicatrización de los
implantes microscópicos abdominales y el cese de la función ovárica y en
algunos casos puede facilitar las maniobras quirúrgicas. No es una medicación
útil para intentar hacer desaparecer los quistes endometriósicos. Pueden darse
como inyectables mensuales o diariamente por vía nasal.
Antagonistas de
la Gn RH. Se hallan
actualmente en estudios experimentales, pero parecen ser fármacos prometedores
a la hora de conseguir una menopausia temporal desde la primera aplicación (en
el caso de los anteriores, aquella se consigue a partir del segundo
inyectable).
Tratamientos
quirúrgicos: Antes de
exponer las alternativas quirúrgicas para la endometriosis, debe quedar claro
que el objetivo de cualquier actuación será encontrar la vía menos agresiva,
pero más eficaz para el control de la enfermedad. Las recaídas no son
infrecuentes, así como tampoco lo es la afectación de ambos ovarios y de otros
órganos pélvicos, por lo cual el criterio de conservación del tejido sano
original es preceptivo.Hoy por hoy, la técnica que cumple mejor estos
requisitos es la laparoscopia. Como ya se ha
citado anteriormente, es una visión del interior de la cavidad abdominal a
través de pequeñas incisiones de unos milímetros, por las que se introducen los
instrumentos de trabajo. Se lleva a cabo bajo anestesia general y hacen falta
unas pruebas previas, como radiografía de tórax, electrocardiograma y análisis
de sangre. La misión del ginecólogo laparoscopista será eliminar toda sustancia
endometriósica activa macroscópica, intentando la mínima lesión del tejido
sano. El tejido enfermo se remitirá para estudio, cuyo resultado le será
proporcionado a la paciente unos días más tarde. La estancia hospitalaria suele
ser corta, de uno o dos días y la vuelta a la actividad normal, sucede en una o
dos semanas.Cuando el campo quirúrgico abdominal es complicado y el cirujano
observa múltiples adherencias firmes entre los órganos genitales internos
(útero, trompas y ovarios) puede decidir que la técnica laparoscópica es poco
conveniente ante la inminencia de lesión de una víscera vecina al foco de
endometriosis (intestino delgado o grueso, vejiga urinaria, uréteres). Entonces
proceder a la apertura del abdomen tal como se realiza para una cesárea, la
denominada laparotomía, con lo que la estancia
en clínica será de 4 a 6 días y la recuperación en casa de 3 a 4 semanas.
Fertilidad
después de tratar una endometriosis: En algunos casos la endometriosis ya no iba a
afectar la fertilidad antes del tratamiento quirúrgico, por lo que es posible
que el embarazo se produzca de inmediato. En otros, si además de los síntomas,
el motivo de la consulta era la esterilidad, no hay garantía absoluta de
embarazo tras la cirugía, puesto que las implicaciones de esta enfermedad
interesan a diversos factores, incluida la ovulación, tanto cualitativa como
cuantitativamente. Sí puede asegurarse que la posibilidad de quedar gestante,
en ausencia de otros factores en la pareja, aumenta notablemente justo tras la
terapéutica médica y/o quirúrgica, por lo cual ésta siempre será aconsejable.El
embarazo ejerce un efecto protector sobre el desarrollo de futura
endometriosis. Es sabido que los ovarios se mantienen en reposo durante los
meses de gestación y por tanto sin secreción de hormonas femeninas. Sin
embargo, nunca deberá aconsejarse a una paciente que quede embarazada para un
mejor control de su problema.
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